viernes, 29 de noviembre de 2013

Tarta de chocolate casera.

Llega el día del cumpleaños de mi hermana, y la verdad es que hace tan poquito que se fue nuestro padre que no teníamos muchas ganas de celebrarlo, sobre todo ella. 

Pero está Oier, y solo tiene 4 añitos, se merece tener la infancia más feliz que le podamos dar. Además el día del cumpleaños de mi hermana es el día 29 de noviembre, día de San Saturnino, patrón de Pamplona y por lo tanto festivo, y esa noche Oier se quedó en casa de la yaya a dormir. Cuál fue la propuesta? "Vamos a hacerle a mamá una tarta de cumpleaños para mañana?", contestación de Oier, "sí, sí, sí, de chocolate".

O sea que los dos nos vamos a la cocina y nos metemos en el lío.

Ingredientes para el bizcocho:

- 4 huevos.
- 6 cucharadas de azúcar.
- 150 ml. de leche.
- 1 pizca de sal.
- 6 cucharadas de Cola Cao.
- 1 cucharada de harina.
- 1 sobre de levadura en polvo.
- 1 nuez de mantequilla.

Para el relleno y la cobertura: 

- Mermelada de fresa o frambuesa.
- Chocolate de cobertura. 

Modo de preparación.

Hay que separar las claras de las yemas de los huevos. 
 
Las yemas se ponen en un recipiente y se baten, y se continúa batiendo la mezcla mientras se van añadiendo los diferentes ingredientes, la leche, el azúcar, el Cola Cao con la harina y la levadura en polvo y un poco de sal. El Cola Cao y la harina es mejor echarlo tamizado para que se mezcle bien y no queden grumos. Tiene que quedar una mezcla homogénea y compacta.

Las claras se ponen a punto de nieve en otro recipiente y ambas mezclas se unen con mucho cuidado, con movimientos envolventes para que las claras no se bajen.

Se coge un recipiente apto para el microondas y se le da mantequilla, se echa una cucharada de Cola Cao y se reparte por todo el recipiente quitando el exceso, para que luego sea más fácil desmoldarlo. Y se añade toda la nueva mezcla.

Se mete en el microondas a máxima potencia durante 8-10 minutos. Es mejor que se compruebe si el bizcocho está cocido antes de que se quede seco, porque no todos los microondas son iguales y cada uno utilizará un recipiente diferente.

Para hacer que el bizcocho sea de chocolate también se puede utilizar chocolate de cobertura derretido con un poco de leche en vez de Coca Cao. En ese caso podrá ser necesario un poco de harina y menos leche para que la mezcla sea compacta.

Hay que dejar enfriar el bizcocho antes de desmoldarlo, y cuando está frío se puede cortar. Hay que sacar al menos 2 capas, pero según el grosor se pueden sacar 3 ó incluso 4.

En un cazo al fuego se pone un poco de vino moscatel, se añade azúcar y un poco de agua y se lleva a ebullición para que desaparezca el alcohol; también se puede hacer un almíbar. Con eso hay que empapar cada capa de la tarta.

Sobre la primera capa de pone mermelada de fresa o de frambuesa, una buena capa y extendida pero que no llegue al borde de la capa para que al poner la de encima no se salga la mermelada. Si se hacen más capas se puede rellenar con mermelada o con nata montada, o con lo que se quiera que vaya bien con el chocolate (crema de chocolate, un mousse de chocolate, nata, fresa ...).

Para terminar hay que hacer un poco de chocolate de cobertura para cubrir toda la tarta. Se puede además decorar de mil formas: virutas de chocolate, nueces u otros frutos secos, nata montada ... Y así tenemos una tarta tipo Sacher pero casera.

 

Finalmente Oier estaba encantado con el resultado, había hecho una tarta para su mami, la mejor mami del mundo (la verdad es que estuvo dándole a las varillas para hacer la primera mezcla de ingredientes, e incluso se atrevió a batir las claras), decía que la tarta estaba "deliciosa"; celebramos el cumpleaños casi alegres cuando pensábamos que sería un día horrible, recordando a quien nos falta por supuesto, pero nadie dijo nada, no hacía falta mencionarle porque estaba con nosotros.

jueves, 31 de octubre de 2013

Por Todos los Santos ... PUCHES!.

En la zona de la que soy, y en casi toda Castilla, por Todos los Santos era típico hacer puches.

Puches parece que procede del latín "pultes" que era una papilla de harina.

Mi abuela Inés las hacía en casa, en la lumbre baja, las tardes-noches de la víspera de Todos los Santos y/o el día de Todos los Santos, y con picatostes. El día de Todos los Santos, además, se compraba lomo de cerdo que se asaba en buenos filetes en la lumbre, y se comía entre pan y pan (nada de plato, y cubiertos). 

La verdad es mi madre lo ha recordado toda la vida, pero las ha hecho muy pocas veces, la última que recuerdo fue hace unos años y reconozco que no me gustaron mucho. 

Hace unos días comentó que este año iba a hacer puches, reconozco que pensé "puff, no me apetecen!", pero la animé, es una tradición que aunque sea de vez en cuando no está mal; y casualidad, hace unos días en una red social una amiga recordó esta tradición, preguntando la receta, o sea que como le comenté que si finalmente las hacíamos en casa las subía, ahí va la receta.



Ingredientes:

     - 3 cucharadas de harina de trigo.
     - 2 cucharadas de azúcar.
     - Leche.
     - 2 rebanadas de pan.
     - Aceite.

Preparación:

Lo primero que hay que hacer es cortar las rebanadas de pan en dos bastones alargados, poner aceite de oliva en una sartén y cuando esté bien caliente freír los 4 bastones de pan para conseguir los picatostes. Tienen que quedar bien dorados pero no quemados, y se reservan.

En el aceite que ha quedado de hacer los picatostes se añade 2 cucharadas de azúcar y 3 de harina de trigo, y como si fuéramos a hacer una salsa bechamel o unas gachas, hay que tostar la harina durante al menos 8 ó 10 minutos, precisamente para que las puches no sepan a harina.

Cuando la harina está bien tostada hay que ir añadiendo leche poco a poco, de igual forma que para hacer una bechamel. Hay que ir añadiendo hasta que cojan un espesor considerable, no duras, pero si espesas. Y una vez que están en ese punto hay que cocerlas también 5 ó 6 minutos sin dejar de mover. Se puede dejar sin remover solo al final, para que he haga un poco de "pegao" en el fondo de la sartén.

Una vez que están hay que coger los picatostes y meterlos en las puches, al menos así se hacía en mi casa, pero el que quiera los puede dejar fuera o incluso no hacerlos. Y lógicamente, eso de utilizar platos tampoco estaba en el guión, lo más divertido es comerlas en la propia sartén armados con una cuchara.

Como variantes que he visto en otros puntos, están la canela o los granos de anís machacados.

Yo no recuerdo esta tradición, cuando mi abuela Inés falleció yo tenía muy pocos años, pero no están mal, aunque reconozco que para mí no son, como un par de cucharadas y un picatoste tengo suficiente, creo que hasta el próximo año, pero son una tradición, y mantenerla tampoco resulta tan malo. 

Yo sí recuerdo otra tradición la noche de Todos los Santos, una que además me encantaba, la de hacer cabezas de calabaza. Había que coger una buena calabaza, vaciarla con mucho cuidado de pipas y carne hasta dejar la piel fina y firme, y dibujarle para luego recortar, unos ojos y una boca fantasmagórica. 

Con eso y una vela nos íbamos de casa en casa "tratando de asustar" a la gente: encendíamos la vela, echábamos unas gotas de cera en el suelo para que la vela se sujetara y encima poníamos la calabaza, de forma que si estaba bien echa toda la calabaza relucía con la horrible cara; todo lo hacíamos con todo el silencio que podíamos, que realmente en ocasiones era muy poco, y cuando estaba todo preparado llamábamos al timbre y nos escondíamos. A veces, hasta nos daban algunas monedas, pero en alguna ocasión también es cierto que salía el chico más mayor que nosotros que trataba de darles una patada, con lo que nos fastidiaba la diversión.

En cualquier caso, buen Hall..., Hallow..., no me sale, buena noche de Todos los Santos!


 




sábado, 12 de octubre de 2013

Patatas chips con ... tropezones!.

Ésta es una de esas recetas divertidas, divertida de hacer y más divertida de comer. Una receta en la que la imaginación tiene que fluir, porque realmente casi la puedes hacer con lo que quieras.

No tiene nada del otro mundo, en casa en ese momento había poca cosa, pero para probar me arreglé con lo que tenía, ya llegará otro día con variantes varias.
 

Ingredientes:

   - Patatas chips, pueden hacerse en casa o utilizar las de bolsa.
   - Jamón York.
   - Salsa bechamel.
   - Tomillo, pero se puede sustituir o completar con orégano y otras plantas aromáticas.

Para la bechamel:

   - Aceite de girasol.
   - Harina.
   - Queso, del que cada uno quiera.
   - Sal, pimienta blanca y nuez moscada.

Lo primero hay que hacer una bechamel suave y tirando a ligera, nada de espesa. A esta bechamel se le añade el queso para que se disuelva, en este caso tiene Camembert.

Se tiene que dejar enfriar hasta que se quede a temperatura ambiente, pero de vez en cuando hay que moverla para integrar la capa superior que al enfriarse se queda más dura.

Se ponen las patatas chips en un plato se añade el jamón york en taquitos, se vuelven a poner patatas chips y por último un poco más de jamón york.

Se va echando poco a poco la bechamel por encima, intentando que llegue a todos los rincones. Es importante que la bechamel esté a temperatura ambiente porque si está caliente las patatas chips dejarán rápidamente de ser crujientes. 

Se espolvorea con un poco de tomillo y están listas para comer, y como decía antes, todavía son más divertidas para comer, puesto que lo mejor es comérselas con los dedos y una buena servilleta.
  




 
Ya os decía que para probar me conformé con lo que tenía en casa, pero las OPCIONES son muchas.

1. Patatas chips con taquitos de jamón serrano, champiñones, taquitos de queso y bechamel.

2. Patatas chips con virutas de jamón serrano, tomate y cebolla deshidratados, taquitos de queso, pimiento frito y bechamel.

3. Patatas chips con carne picada o solomillo de cerdo y taquitos de verduras sofritas (cebolla, ajo, pimiento rojo y verde, zanahoria, calabacín, etc.) y bechamel.

4. Patatas chips con taquitos de pollo, maíz y verduras sofritas (cebolla, ajo y calabacín) y bechamel.

5. Añadir a la bechamel un poco de salsa barbacoa o kétchup.

6. Presentar de forma diferente el plato, un bol con la salsa bechamel y los ingredientes que la acompañen y otro con las patatas chips, de esa forma además en ningún momentos las patatas chips dejarán de ser crujientes.

7. Vinagreta con patatas fritas, y esta sí la he probado hace tiempo y está deliciosa. Hacer un picado fino de tomate, cebolla y huevo cocido (también se le puede añadir pimiento rojo y verde, pepinillos en vinagre, etc.), aliñar con sal, aceite de oliva y vinagre de Módena y acompañar con patatas chips.

jueves, 3 de octubre de 2013

Rollitos de jamón york con sorpresa.

Hace unos meses me apetecía algún aperitivo, pero tampoco sabía qué hacer. 

Mirando en la despensa encontré un bote de puntas de espárragos, como casi todos los fines de semana había tomates cherry, y en el frigorífico había jamón york. Justo! ... me encanta el pan con el agua de los espárragos y un poco de mahonesa y pensé en darle una vuelta.

Ingredientes para cada pincho.
 
   - 1 rebanada de pan de molde sin corteza.
   - 1 loncha de jamón york (cuadradas para sándwich más cómodo).
   - Mahonesa.
   - 1 punta de espárrago.
   - 1 tomate cherry.

Hay que recortar el espárrago para que sea del mismo tamaño que la rebanada de pan de molde, y reservar tanto la punta como lo trozo que queden.

Ese trocito que queda se machaca con un tenedor hasta que quede como una pasta fina, se pone en una taza y se le añade un poco de mahonesa y un poco del agua de los espárragos. Hay que trabajar esos ingredientes para conseguir una pasta muy fina y algo líquida con la que empapar las rebanadas de pan de molde para que se puedan enrollar.

Se pone una rebanada de pan de molde sobre la mesa y "se pinta" con la mezcla de la mahonesa y espárragos hasta que esté blanda como para enrollar y que se quede con la forma, pero con cuidado no vaya a ser que esté demasiado empapada y se rompa.
 Se cubre la rebanada con el jamón york, pero no se pone hasta el final para que al enrollarlo todo no sobresalga.

Encima del jamón york y en uno de los extremos se pone una punta de espárrago y se enrolla con cuidado.

Cuando cada rollito está hecho se corta a la mitad y encima, a modo de decoración se termina con un poco de mahonesa y medio tomate cherry.

 
 
Y buen provecho!

miércoles, 2 de octubre de 2013

Ensalada de bacon y queso.

A la lechuga se le puede echar casi de todo, y casi siempre está buena.


Personalmente me gustan las ensaladas "de carne o de pescado", y ésta de bacon, con más o menos ingredientes, suele ser muy socorrida y muy rica.
 
Ingredientes.
 
   - Lechugas variadas y canónigos.
   - Tomates cherry.
   - Queso curado.
   - 3 lonchas de bacon curado.
   - Pasas de Corinto.
   - Sal y tomillo.
   - Aceite de oliva, vinagre de Módena y reducción de vinagre de Módena.

Opcionalmente se puede añadir un poco de cebolla muy picada, maíz y aunque ese día no le puse, los piñones le van como anillo al dedo.
 
Hay que cortar las lonchas de bacon en bastones de 1 cm más o menos y freírlas con aceite de oliva, sacarlas a un plato con papel absorbente para que suelten el aceite y reservarlos.
 
Hay que sacar lascas de queso curado y reservar. 

Se limpian bien, se escurren quitándoles todo el agua y se mezclan las lechugas y los canónigos y se reservan, y se parten a la mitad los tomates cherry y también se reservan.
 
En un bol se hace la mezcla del aliño, 3 partes de aceite de oliva por 1 de vinagre de Módena, y un chorrito de reducción de vinagre de Módena y se mueve con un tenedor para que ligue. Se machaca en el mortero la sal y un poco de tomillo y se añade al aliño.

En el fondo de un plato grande se pone parte de la mezcla de las lechugas y se echa un poco del aliño, se añade parte del bacon, algunas pasas, parte de los tomates cherry y parte del queso, y echa otro poco del aliño. Se ponen el resto de mezcla de las lechugas y de nuevo el bacon, las pasas, los tomates y el queso y un poco más de aliño. Que en la parte de arriba quede a la vista parte de lo que tiene (bacon, queso, pasa y tomates, pero la mayor parte esté escondido debajo de la lechuga). De esta forma está todo mezclado y aliñado sin que haya que recurrir a moverlo en la mesa.
 
Y a disfrutar de un plato de lechuga.



Ensalada de tomate y queso o pincho de queso y tomate ... y porqué no los dos?

Tomate y queso, dos grandes productos que, al menos en mi casa, no pueden faltar.
 
A todos nos gusta la tradicional ensalada de tomate, pero porqué no reconvertirla en un pincho?. Pues ésta es la forma en la que yo lo hago.


 
ENSALADA DE TOMATE Y QUESO.
 
Ingredientes.
 
   - 2 tomates grandes.
   - Queso brie.
   - Queso de cabra.
   - Queso curado.
   - Sal y tomillo.
   - Aceite, vinagre de Módena, y crema vinagre de Módena.
 
Hay que cortar el queso y el tomate en dados como de 1 ó 1'5 cm., y meterlos en una ensaladera. Se aliña con aceite y vinagre de Módena (proporción para 3 cucharadas de aceite 1 de vinagre de Módena) y añadirle un chorro de crema de vinagre de Módena. En un mortero se echa la sal y el tomillo y se tritura y se añade.

 
PINCHO DE QUESO Y TOMATE.
 
Como ya digo es una variante de la anterior, pero únicamente usando queso de cabra.
 Ingredientes.
 
   - Tomate cherry.
   - Rulo de queso de cabra pequeño. 
   - Aceite.
   - Reducción de vinagre de Módena.
   - Sal Maldon o cualquier sal de escamas.
   - Tomillo.

Se corta el rulo de queso de cabra en rodajas de ½ cm. aproximadamente, y encima  se echan unas gotas de aceite de oliva, una buena gota de reducción de vinagre de Módena y medio tomate cherry. Y cuando se van a sacar a la mesa se pone una pizca de tomillo y un poco de sal Maldon (sal de escamas).


Hay que seguir adelante.

Hay que seguir adelante todos los días. 
 
Hace mucho que no entro en el blog, no publico nada aunque he seguido haciendo de cocinilla en este tiempo ... pero la verdad es que no he tenido muchas ganas de nada. Una larga enfermedad ha terminado por llevarse a mi padre. 
 
Hace unos días una de mis amigas me comentó que porqué no subía alguna receta de la que habíamos hablado, y me di cuenta de que hacía mucho que no publicaba nada, pero ya es hora. Mi padre y mi madre nos han enseñado a seguir adelante, pase lo que pase, y a vivir la vida como venga, y eso es lo que tengo que hacer, o sea que volveré en breve a subir mis recetillas, por si a alguien le gustan y le sirven. 
 
Gracias papá, te quiero.

viernes, 3 de mayo de 2013

Manitas de cerdo.

Esta receta no la he hecho yo.

Es lo primero que debo decir, en honor a la verdad. La ha hecho mi madre, la gran cocinera de la casa, pero como me gustan muchísimo (aunque para comer de vez en cuando) pues al final he cogido nota de cómo se hacen, y para no perder la receta ha pensado, al blog.
 
Ingredientes:

- 4 patas de cerdo.
- 2 hojas de laurel.
- 1 chorizo en rodajas.
- 1 loncha de jamón serrano en tacos.
- 1/2 cebolla.
- 2 dientes de ajo.
- Sal.
- 1/2 cucharadita de pimentón.
- Una pizca de cominos.

Lo primero que hay que hacer es limpiar bien las patas debajo del agua, sacarles toda la sangrecilla que se pueda, quitar todas las impurezas, quitar los pelos que hayan podido quedar, etc.

Limpias se ponen a cocer en la olla a presión con un par de hojas de laurel y un poco de sal. Hay que cocerlas bien, un par de horas, abriendo la olla de vez en cuando para cambiarles el agua y que luego no resulten fuertes.

Una vez que se han enfriado lo suficiente hay que deshuesarlas, y tras ello se añaden a la cacerola en la que se vayan a terminar.
 
En una sartén se pica un poco de cebolla, como una cuarta parte de una cebolla pequeña y se pone a pochar. Cuando está pochada se añade el jamón en taquitos y el chorizo en rodajas, y cuando está frito y ha soltado el aceite se retira y se añade un poco de pimentón. Tras un momento para que no se queme se añade a la cacerola en la que están las patas.

Se pela y se machaca en el mortero un ajo, muy machacado, casi consiguiendo una pasta para que luego no se vea, y con un poco de agua para que no quede nada en el mortero, se añade a la cacerola.
 
Se añade un poco de cominos molidos (si no tienes molidos y los tienes en grano pues ten la previsión de machacarlos en el mortero con el ajo y asunto arreglado), unas hebras de azafrán, media pastilla de caldo de carne y agua  casi hasta cubrir las patas.
 
Con eso las patas están arregladas, se ponen a cocer un poco y se prueban de sal por si acaso fuera necesario añadirles un poco.
 
Es el arreglo tradicional de los callos, y es como ya desde mi abuela Inés se vienen haciendo en mi casa.





jueves, 2 de mayo de 2013

Piruletas de morcilla y piñones.

Ésta es una receta de la pasada Navidad.

Me gusta la mezcla de hojaldre y salados, y en una revista vi una mezcla que tenían muy buena pinta y total que me animé a probar.
 
Ingredientes:
 
- 1 morcilla de Burgos.
- 1 puñado de piñones.
- 1/4 cebolla pequeña picada.
- 2 ó 3 pimientos del piquillo picados.
- 1 plancha de hojaldre.
- Sal y pimienta.
- Palitos para brochetas.
 
Hay que picar mucho la cebolla, añadir un poco de aceite de oliva a una sartén, y pocharla.

Cuando la cebolla está pochada hay que añadir la morcilla de Burgos, para ello hay que quitarle la tripa y trocearla. Hay que sofreír bien la morcilla y mezclarla con la cebolla pochada aproximadamente 7 u 8 minutos. Hay que añadirle los piñones y los pimientos del piquillo picados y rectificar de sal y pimienta (cuidado, no hemos cocinado nada que previamente no estuviera cocinado más que la cebolla, por lo tanto sal en principio no necesitaría). Cuidado con el aceite, no puede quedar exceso, es mejor pasar por un escurridor la mezcla para que suelte ese posible exceso si lo tiene.

Hay que extender la lámina de hojaldre hasta que tenga un grosor de 0'5 centímetros aproximadamente y conformarla de forma rectangular, añadir la mezcla anterior y extender sobre la lámina de hojaldre una capa regular (no lleguéis hasta el final del hojaldre, dejad un par de centímetros sin cubrir).

Con mucho cuidado hay que enrollar el hojaldre con la pasta hasta formar un cilindro; cuidado con apretar mucho ese cilindro conforme lo vamos haciendo puesto que cuando el hojaldre se cueza se va a expandir y en ese caso se romperá.

Una vez tenemos el cilindro, coincidiendo con el final de la lámina de hojaldre y a 2 centímetros de separación entre ellos aproximadamente, hay que clavar los palos de brocheta casi hasta el final del cilindro; tras esto tenemos que cortar el cilindro entre las brochetas para conseguir la forma de piruletas (cuidado porque hay que mantener la forma de la piruleta, no apretéis mucho al cortar porque es muy endeble).

Se ponen en una bandeja con papel para horno y hay que hornearlas durante 15-20 minutos de cada lado a 180-200 grados, hasta que el hojaldre esté cocido.

Yo he probado el relleno de las piruletas de morcilla, pero esto no es lo único que se puede hacer. Otras opciones:

- Paté de pato o de oca.
- Lonchas de jamón york y queso.
- Lonchas de jamón serrano, queso, champiñones o setas picados.

 




sábado, 27 de abril de 2013

Hace un pincho de mini hamburguesa?.

Desde hace un tiempo, al menos en Pamplona que es donde vivo, se han puesto de moda las mini hamburguesas. Muchos bares las ofrecen entre sus pinchos, y hace unos días, en la reapertura de una carnicería, me di cuenta de que también las tenían para que el cliente no tuviera que estar readaptando el tamaño de las normales.

 

En mi casa las hamburguesas casi siempre han sido caseras, pocas veces se han comprado hechas ya. Cuando vivía en Pontevedra había una carnicería que tenía unas magníficas hamburguesas de pollo, tras eso alguna vez hemos encontrado unas buenas hamburguesas de ternera, pero las mejores son las caseras.

Anoche nos hicimos una hamburguesa con patatas fritas para cenar, y quedó un poco de carne, o sea que esta mañana he hecho un pincho.

Ingredientes:

- Carne picada de cabezada de cerdo y de ternera, a partes iguales. También puede ser de pollo, o pavo, o ternera sola, o se le puede añadir un poco de panceta fresca picada.
- Ajo.
- Sal, pimienta y nuez moscada.
- Perejil, orégano y tomillo.
- Vino blanco.
- Aros de cebolla.
- Rodajas de tomate natural.
- Tomates cherry.
- Lechuga picada.
- Pepinillos en vinagre.
- Crema de queso.
- Rebanadas de pan de molde, se pueden utilizar también bollos de pan redondos. 
- Mahonesa, kétchup, mostaza, salsa barbacoa.

Lo primero hay que aderezar el carne picada para que esté sabrosa. Se pone en un bol y hay que añadirle sal, pimienta, un poco de nuez moscada, un poco de perejil, orégano y tomillo (las 3 hiervas muy picadas y en su justa medida para que su sabor no sobresalga demasiado), un ajo muy picado y un poco de vino blanco. Hay que mover todo para que se mezcle perfectamente, ponerle papel film y meterlo en la nevera al menos 2 horas para que se mezclen todos los sabores.

Hay que coger las rebanadas de pan de molde y cortarlas con un molde redondo que va a ser el que determine el tamaño de la hamburguesa. En una plancha hay que tostar por uno de sus lados el pan.

Hay que cortar rodajas muy finas  de cebolla, de tomate, y de pepinillos en vinagre y picar una hoja de lechuga fresca.

Cogemos porciones de la carne picada, le damos forma de hamburguesa y las hacemos a la plancha.

Respecto del queso, para gustos colores, yo he hecho una crema de queso con queso de untar, queso tipo azul y nata líquida, pero se puede utilizar el queso que se quiera (cheddar, queso en lonchas ...).

Tenemos todos los ingredientes o sea que no queda más que montar el pincho. En el pan de molde untamos un poco de mahonesa, ponemos unas rodajas de tomate, las de pepinillos en vinagre, y añadimos un poco de kétchup y de salsa barbacoa, colocamos encima la cebolla, un poco de crema de queso y la hamburguesa; terminamos con más crema de queso y con un tomate cherry. Si colocamos un palo de brocheta atravesando todo impediremos que se caiga y quizás sea más fácil comerlo.

Ésta es la forma en la que las hemos hecho hoy, pero las variedades son muchas. Se puede hacer la cebolla a la plancha o hacer los aros fritos con un poco de harina; se pueden añadir unas virutas de bacon o directamente poner una loncha de bacon a la plancha; se puede añadir también un huevo de codorniz frito, ... 

 



jueves, 18 de abril de 2013

Brochetas de solomillo

"Tengo que comenzar a ordenar mi vida. Ha llegado el punto de inflexión." 
 
Eso puse en una red social el pasado día 19 de marzo, y desde entonces estoy pacientemente esperando y poniendo os peldaños para hacerlo.
 
Ayer fue un día importante. A las 14'30 horas me desvinculé definitivamente de mi trabajo, y además como una señora y por la puerta principal. En estos días ha habido días en que he estado muy bien, segura y decidida, y sobre todo feliz de finalmente tomar yo la iniciativa, tener capacidad de decidir y finalmente decidir, y eso se refleja en todo.
 
El pasado viernes me apetecía cocinar, y llevaba unos días con ganas de comer unas brochetas.


Ingredientes:
 
- Solomillo de cerdo, cortado en medallones de 2 cms. de grosor.
- Champiñones.
- Calabacín.
- Pimiento verde.
- Bacon en lonchas.
- Dátiles.
- Ajo.
- Vino blanco.
- Sal y pimienta.
 
Hay que quitar las pepitas del pimiento y cortarlo en trozos grandes, ponerlo en un recipiente con un poco de sal, vino blanco y un poco de aceite y meterlo al microondas hasta que esté pochado.

Cuando está pochado se pone un poco de aceite en una sartén y se añade el pimiento para que coja un poco de color y quede más sabroso.
 
Los champiñones se limpian bien, se les quita el pie, y se meten al microondas de igual forma que los pimientos (sal, vino blanco y un poco de aceite) para que también se hagan. Y como antes, para que se queden tostados se pasan a una sartén con un poco de aceite.
 
El calabacín se trocea en rodajas de al menos 0'5 cms. de grosor, se echa un poco de sal, se pasa por una plancha y se reserva.
 
Hay que coger el dátil, cortarlo a la mitad a lo largo y quitarle el hueso interior, y cada mitad rodearla con media loncha de bacon.

Tenemos todos los componentes de la brocheta para formarla como más nos guste: medallón de solomillo, pimiento verde, rollito de bacon, pimiento verde, medallón de solomillo y para terminar con el champiñón.
 
Se espolvorea la brocheta con un poco de pimienta molida y a la plancha.
 
El pimiento verde y el champiñón en el microondas habrá soltado un poco de agua que se ha unido con el vino blanco, y con ella se puede hacer una especie de salsa para  que la brocheta sea más jugosa.
 
Para ello hay que picar ajo muy menudo y freírlo con cuidado para que no se queme. Cuando está tostado hay que añadir los jugos de haber cocinado el pimiento verde y el champiñón y dejarlos reducir, aunque si no sale bien o para no estar mucho tiempo se puede espesar un poco esa salsa con harina de maíz.
 
Otra opción para acompañar la brocheta es una reducción de vinagre balsámico de Módena, o una crema de queso.